(341 palabras) El poema "12" describe el choque de dos mundos: el viejo y el nuevo. Uno destruido, frío, sin esperanza, el segundo rápido, agresivo, drogado. La escena es Petrogrado. Ya no es una capital majestuosa, sino una ciudad negra y sin vida arrastrada por los vientos. Devastación en todas partes, pobreza y crueldad. Las personas de la desesperanza de su situación dejan de ser personas, lo que el autor enfatiza, dibujando la analogía "anciana - pollo", "perro burgués". El pasado es derrotado incondicionalmente, sus representantes ya no luchan por el poder, ahora su único objetivo es la supervivencia. El futuro es despiadado, está listo para quemar todo y destruir a cualquiera que se interponga en su camino. El nuevo mundo es despiadado no solo para los enemigos, sino también para los asociados. Esto se ve claramente en el episodio del asesinato de Katya: el culpable es reprimido por lo que sucedió, pero sus camaradas, en lugar de apoyarlo, expresan su desaprobación de tal sentimentalismo, demostrando otra característica del pensamiento revolucionario: no es la persona lo importante, sino la idea.
Todo el poema está plagado de contrastes. El bloque enfatiza la división del mundo todo el tiempo: el blanco y negro dominan en el esquema de color. El lector ve a la infeliz anciana y al escritor aplastados por el golpe, o al destacamento de doce inspirados por los cambios. Contraste y actitud ante la revolución. Al principio vemos representantes del viejo mundo: están amargados, deprimidos, decepcionados. Todas estas personas viven con una sensación de desastre, las frases "Rusia ha perecido", "Nos destruirán", "Ya lloramos, lloramos", "Traidores", etc., se escuchan constantemente. Pero también vemos otro punto de vista: la actitud de los representantes del nuevo mundo, que finalmente se han convertido en dueños de la vida, celebran la victoria y se deleitan en el poder. Para ellos, la revolución es una bendición que cambió para siempre su vida, solo que gracias al nuevo gobierno ascendieron a la cima de la jerarquía social.
Entonces, ¿cuál es la relación con la revolución en el poema? Creo que para responder a esta pregunta vale la pena echar un vistazo más de cerca a la imagen del viento. Es con él que todo comienza: "¡Viento, viento, en toda la luz de Dios!". Un análisis de estas líneas de apertura lleva al lector atento a la idea de que el viento es una especie de metáfora para la revolución, un símbolo de cambios espontáneos que superan cualquier obstáculo y afectan a todos sin excepción. Comprender esto es la clave para entender la relación con los eventos de 1917 en el poema. Como es imposible relacionarse inequívocamente con el viento y su fuerza, también es imposible juzgar unilateralmente un golpe de estado. Al igual que el viento, es solo un factor externo que afecta a las personas de manera diferente. Alguien es derribado por el viento, y alguien opuesto es impulsado a seguir adelante.